CC: Mi actriz invitada ha trabajado muchísimo en el Teatro,
la Televisión,
Radio, Cine, fue profesora de actuación en la ENA,
actualmente se mantiene como profesora de actuación en el ISA, ha sido Directora de Teatro, actualmente es
Directora del Grupo Trotamundos, Artista Emérito de la UNEAC, Premio Nacional de
Teatro, Premio Nacional de Televisión, y actualmente la estamos viendo en la
telenovela “Bajo el mismo Sol”, se trata de la primerísima actriz Verónica
Lynn.
VL: Gracias por ese recibimiento.
CC: Usted comienza en
la Televisión
muy joven .
VL: Llevo trabajando en la Televisión 56 año. Yo
empiezo trabajando en un espacio de aficionados que tenía Gaspar Pumarejo ,
entonces los que ganábamos en ese concurso, que tenía un tribunal, pasábamos a
formar parte del elenco artístico de Pumarejo. Y ahí pues comenzó a formar
programas humorísticos y dramáticos, yo recuerdo que trabajé con Juan Carlos
Romero en un programa que salía a las once de la mañana y trabajé con Ceverino
Puentes en un programa las dos de la
tarde en un programa que patrocinaba “El arroz El Gallo”, él era El Gallo y yo
era la secretaria del Sr. Gallo, y
después estaba un programa que salía los Domingos a las nueve de la noche, un programa
estelarísimo, que se llamaba Teatro Azul, programa al cual Gaspar Pumarejo
trajo a Carmen Montejo, cubana, pero que vive en México, a conducir ese
programa, y nosotros, los ganadores del concurso formábamos parte del elenco
del programa, gratis, es bueno aclarar eso, todos estos programas que antes
mencioné fueron gratis. La primera cosa que hice fue una obra argentina que se
llamaba “La millona”, qie Lolita Berrios lo animaba, ella y Pumarejo eran los
que animaban la programación. Yo procedo
de una familia muy pobre, nosotros conocíamos lo que era el Radio, el Cine, y
en el 50 la Televisión,
recuerdo que en el 51 mi mamá compró a plazos un televisor, pero el Teatro no
lo conocía, y yo quería ser artista de cualquier medio, entonces un compañero
mío de aquella época me dijo que si no quería ser artista de Teatro, y yo le
dije que no conocía ese medio, y él me dijo: “cuando lo conozcas vas a ver”. Y
estaba Alfonso Silvestre en ese grupo, y entonces y me dice: “mira, nosotros
estamos montando una obra de los torcedores,
el teatrico que existe por Centro Habana, y necesitamos una actriz,
porque todos eran hombres y necesitaban una mujer, y yo dije que si, y me
aseguró que cuando yo pisara un tablado entonces si yo iba a amar ser artista.
No pisé el tablado porque era teatro arena, pero era más difícil porque estabas
más cerca del público, pero realmente para mí fue un descubrimiento. Dejé la Televisión, y ya había
dejado lo que anteriormente yo hacía que era trabajar como manicurista,
pedicurista, hacía tratamiento de champú, de cutis, yo era la jefa de ventas,
cosa que no quería decir nada, solo era que tenías que salir con un maletín
inmenso , de piel, lleno d eproductos para vender y promocionar, y tenía que
recorrer todo lo que hoy es Marianao, Playa, Miramar, todo eso, era mi zona,
entonces yo tenía que estar a las nueve de la mañana en una peluquería para trabajar,
cerraban de una a tres, y después tenía que estar hasta las siete de la noche
que cerraban , con el grupo de los traedores no tuve problemas, pero cuando
entro en “El Teda”, que es el grupo de Teatro de Arte Experimental, que estaba
en O entre 23 y 25; porque la persona que crea de verdad un movimiento cipiente
de teatro en Cuba, nace con la puesta de la obra “La ramera respetuosa”, en lo que después fue Thalía, pero en
aquel momento era un salón y era con
sillas de tijera, era teatro arena y fue el Director del “Teda”, Erick
Santamaría, y de ahí empiezan a surgir las salas de teatro, y él crea su sala
de teatro, porque ya estaba “Arlequín”, “Thalía”, ”Farcero”, “Prometeo”, “Prado
260”, sin dejar de decir que La
Habana, era el centro obligado de cualquier compañía de
teatro dramática del mundo, sobre todo
de España, pero también venían de Francia. Y yo, bueno, tenía mucha pasión pero
técnica ninguna, y un actor, que ya tenía su espacio hecho en los medios, me
ayudó muchísimo, y fue Angel Toraño. Entonces como te dije antes, todos
trabajábamos, y después del trabajo hacíamos teatro, yo me iba antes de mi
peluquería y a las cuatro ya yo estaba en los ensayos que terminaban a las ocho
y a las nueve ya empezaba la puesta de la obra.
CC: Llegan los años 60 y le llega a Verónica la oportunidad
de trabajar en dos obras que le han marcado para toda la vida y las que guarda
entre sus mayores tesoros, estamos hablando de: “Santa Camila de la Habana Vieja” y “Aire
Frío”, obras que primero hizo en el Teatro y después en la Televisión, inclusive
en una ocasión hasta de manera seriada en la Radio.
VL: Maravillosas, las dos fueron seriadas en la Radio, muchas actrices han
interpretado a la Camila,
la interpretación de Adria Santana fue muy buena, otras no las he visto, lo
pasa es que cuando yo la hice fue su estreno mundial, fue un momento
importantísimo para el teatro cubano, y para mi; mi actuación creo que fue muy
buena, primera vez que hacía una obra cubana, con un personaje tan cubano,
entonces para mi enfrentar un personaje con esas características, mulata, solar
urbano, santera, y yo adoro mi Camila, lo que no le soporto a una actriz es que
me la haga chusma, nada más que chusma, Camila es producto de un medio, de un
bajo nivel cultural, pero Camila es pasión, amor, ternura, como buena cubana es
solidaria, mi primera pareja haciendo de Ñico en la obra fue Julito Martínez,
que lo bordó, “Santa Camila” lo montamos en aquel entonces con un rigor como si
fuera “La Gaviota”
de Chejov, a los 20 años repetí la puesta pero con Adolfo Llauradó, otro
grande.
CC: En el caso de “Aire frío” sucedió algo muy curioso, o
gracioso, usted siempre fue Luz Marina,
pero en el año 99 en la útlima versión para la Televisión que se ha
hecho usted hace el papel de la madre de Luz Marina, cómo se sintió usted
actuando del otro lado del personaje que siempre había interpretado?
VL: Además yo estrené “Santa Camila en el mes de Agosto y en
Noviembre ya estaba estrenando “Aire Frío”, otro personaje para mi muy
importante, y un punto de giro para el teatro cubano, el problema es que en esa
ocasión para la Televisión
el personaje de Luz Marina lo interpretó una actriz maravillosa que es Isabel
Santos, el papel de la madre cuando yo lo hice en teatro lo interpretó Lara
Sarrabeitia en el estreno, que fue genial, el equipo completo fue genial, en la Televisión después tuve
a Rosa Felipe, y a los 20 años tuve a Josefina Enrique, es decir que tuve muy
buen referente para interpretar el personaje de la madre, aunque yo tuviera mi
visión muy personal, así que esa versión de “Aire frío” para la Televisión la disfruté
muchísimo.
CC: Qué puede decirnos de su paso por la Radio, donde tuvo directores
como Alberto Arbezú, Julio Lot, Erdwin Fernández, Marta Jiménez Oropesa.
VL: Mira, yo te puedo hablar de mi prime trabajo en el
Radio, fue con Arbezú, y era algo parecido a “Lo que el río arrastra”, recuerdo
que trabajaban Coralia Fernández y Ramón Veloz, ya yo había hecho Camila, y me
llama Arbezú pensando que aquello s eme daría fácil después del éxito del
Teatro, y yo no les puedo explicar lo nerviosa que me puse, el mal rato que
pasé, porque además habían muchas actrices de muchos años, y hubo que cortar
tantas veces por mi, me daba una vergüenza tan grande que no quiero ni
acordarme, después esas grandes actrices fueron amigas y compañeras mías. Pero
de verdad que pasé un mal rato en esa primera vez en la Radio.
CC: Lega el año 1985 y le llega la oportunidad de
interpretar otro personaje que pasarán los años y el público lo va a recordar
siempre, se trata de Doña Teresa Guzmán.
VL: Yo venía de hacer mi primer protagónico en el Cine, en
la película “Lejanía”, y entonces me avisan que Garriga me había pedido para
una telenovela, cuando pregunté me
dijeron que era para “Sol de batey”, después cuando empezaron los ensayos y las
grabaciones Garriga siempre me decía: “este personaje lo vas a recordar
siempre, y va a dar muchos premios”, y efectivamente, fue premio de actuación
en varias ocasiones incluyendo el “Caracol” de la
UNEAC. Y me dio algo que hasta ese momento
no tenía, a mi siempre me admiraron mucho, los profesionales vieron en mi una
gran actriz, hice muchos horizontes, telenovelas, pero popularidad no, eso no
lo tenía, y me la dio ese personaje, a partir de ahí surgió un eslogan que me
pusieron de que yo era “la mala más buena de Cuba”. Pero me dio mucha
popularidad. Para ese personaje yo fui a psiquiatra, amigo mío y le pregunté, y
fue quien me dio las características de ese personaje, porque yo tenía mis
dudas con respecto a que si a final se volvía loca o era algo que ya venia
sucediendo por su forma de ser; él me dijo que no, que el personaje al final lo
que tiene es una crisis producto de su forma de ser. Qué pasa con el malo, que
es el que lleva el conflicto, quien lo crea, por eso es tan importante y tan
interesante para un actor,
CC: Bueno, la carrera de Verónica Lynn es extensa, se nos
quedan muchos espacios en los que ha trabajado, novelas como “El ángel azul”,
“Fortunata y Jacinta”, “Pasión y prejuicio”, “Cecilia Valdés” en el espacio Horizontes
junto a Odalys Fuentes, en el serial
“Para empezar a vivir”, películas como “Lejanía”, “La bella del Alhambra”,
donde interpretó un personaje que igualmente lo disfrutó muchísimo, gracias a
Verónica Lynn por su presencia en la revista.
VL: Gracias a ustedes
por haberme invitado.
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| La Primera Actriz Verónica Lynn en su visita a la emisora CMBF para la sección "Muy Cubanas". Foto Carlos Collazo. |
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